(…) Lo que me gusta es escribir y cuando termino es como cuando uno se va dejando resbalar de lado después del goce, viene el sueño y al otro día ya hay otras cosas que te golpean en la ventana, escribir es eso, abrirles los postigos y que entren. J. Cortázar
Ven a dormir conmigo: no haremos el amor, él nos hará. J. Cortázar
Felices los que eligen, los que aceptan ser elegidos. J. Cortázar
En suma, desde pequeño, mi relación con las palabras, con la escritura, no se diferencia de mi relación con el mundo en general. Yo parezco haber nacido para no aceptar las cosas tal como me son dadas. J. Cortázar
En literatura no hay temas buenos ni temas malos, hay tan sólo temas bien o mal tratados. J. Cortázar
No me creas demasiado optimista; conozco a mi país, y a muchos otros que lo rodean. Pero hay signos, hay signos. J. Cortázar
Nada está perdido si se tiene el valor de proclamar que todo está perdido y hay que empezar de nuevo. J. Cortázar
Todo mañana es la pizarra donde te invento y te dibujo. J. Cortázar
Mi madre fue muy imaginativa y con una cierta visión del mundo. No era una gente culta pero era incurablemente romántica y me inició en las novelas de viajes. (…) Mi madre leía mala literatura, no era culta pero su imaginación me abría otras puertas. Teníamos un juego: «Mirar el cielo y buscar la forma de las nubes e inventar grandes historias. » Esto ocurría en Banfield. Mis amigos no tenían esa suerte. No tenían madres que mirasen las nubes. J. Cortázar
Relacionado:
Julio Cortázar: poemas y relatos en su voz
Julio Cortázar entrevistado en México – 1983 [Completa]
La literatura se protege compartiéndola: @CANALCULTUR
La mejor cita, la del titulo, sin duda…
Definitivamente, Cortázar: un maestro…
A mi me gusta en pequeñas dosis. Rayuela nunca pude terminar de leermelo pero me encantaba coger fragmentos del libro al azar y saborearlos…
Para mi los libros son como hijos perdidos que busco para conocerlos. En una ocasión, encontré a Rayuela en las librerías populares de Cartagena: donde hay libros de segunda mano, tenía buena carátula y buenas hojas, costaba $ 7.000 pesos que no tenía. Me fui a mi casa decepcionado, encontrar un tesoro, un hijo perdido que siempre busqué: bueno, bonito y barato; y no poder comprarlo; sin embargo, como un padre nunca se rinde, al día siguiente, hice milagros para conseguir el dinero, regresé esperanzado a hacerlo parte de mi vida. Y lo había perdido: otro padre lo adoptó.
Eso es porque ese hijo no te pertenecía, aunque tu te empeñaras en apropiártelo…
Supongo que ya lo habrás leído. Por si acaso, aquí te lo dejo, pero en versión digital, para que al menos puedas apadrinarlo 😉
http://www.literaberinto.com/CORTAZAR/rayuela.htm
Jejejejej sencillamente, gracias. Seré un padre ejemplar.
Como de casualidad yo conocí a Cortázar, que en cada página o «casillero» de la Rayuela me invitaba a pensar distinto a lo que venía haciendo. Y fue así que caminé las calles grises, me mojó la lluvia parisina, lloré sus penas, me confundí en sus confusiones, escuché el jazz a medianoche, y todo eso, sin salir de mi casa. Hoy simplemente su literatura se mete en cada rincón de mi vida, todo lo que vivo parece relacionarse, de una forma que no intento comprender, con la magia de Julio Cortázar.
» Vos no elegís la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto.» Simplemente sucede, así como él llegó a mí.
«Todo lo que vivo parece relacionarse, de una forma que no intento comprender» Ese es el poder transformador de la buena literatura. La magia de la poesía, cuentos y novelas inimaginables, transforma tu esencia y ¡nunca podrás ser el mismo!
Saludos.