El Hay Festival 2017 en Cartagena de Indias, recibió a la periodista mexicana Carmen Aristegui, quien lideró el reportaje ‘La Casa Blanca de Peña Nieto’, investigación que puso en jaque la presidencia Enrique Peña Nieto en México y que además hizo que perdiera su empleo.

En Cartagena de Indias, un poco lejos del ‘Muro de Trump’ y a la expectativa de lo que sucederá, el Hay Festival regresa un año más con su ambiente sobrio y literario, pero además periodístico. Con la visita de Carmen Aristegui, periodista mexicana, se traslada a este territorio el debate sobre el recién electo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Aristegui con gran seguridad y al mismo tiempo jocosidad parece no temerle a ese muro, que califica como “una estupidez descomunal” y que además “es una afrenta contra toda América Latina”, durante su visita a este evento.
Los Estados Unidos de América estrenan presidente, este es un hombre que pasó de los programas de televisión y ser dueño de Miss Universo a dirigir la Casa Blanca, se autoproclama el hombre que le devolverá la grandeza su país manejando abiertamente un discurso xenofóbico, discriminatorio, misógino, convirtiéndose en el sucesor del primer presidente afroamericano, situación que podría hasta considerarse irónica. Ese es Donald Trump, sí, el que parece que gobernara desde su cuenta en ‘Twitter’; hace pocos días autorizó dos órdenes ejecutivas en materia de inmigración: una de ellas, pone en marcha el famoso muro que prometió durante su campaña, que consiste en dividir la frontera entre México y Estados Unidos; la segunda radica en estrictos controles de ingreso al país a inmigrantes de origen musulmán.
Todas esas medidas, las justifica el nuevo presidente estadounidense, aduciendo que controlando las fronteras y por ende la entrada de latinos ilegales al país, sobretodo mexicanos, retornarán los puestos de trabajo usurpados a los nativos y a la vez, busca mantener por fuera de EE.UU a los terroristas islamistas radicales. Parece que solo con sus palabras el muro ya se estuviera construyendo, más allá de la frontera con México.
Ante esta situación, no parece clara la posición del vecino directamente afectado: México, bajo el gobierno de un presidente que se enfrenta a un bajísimo índice de favorabilidad y ser uno de los países más corruptos del mundo, tal y como lo registra Transparencia Internacional, pues pasó del puesto 95 al 123, sumando a esto que también aparecen en la lista de los que recibieron sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.
Carmen Aristegui, es recordada por comandar el equipo que se ocupó de destapar un hecho de corrupción que involucraba al presidente Enrique Peña Nieto, su esposa Angélica Rivera y la firma constructora Grupo Higa, encargada de construir ‘La Casa Blanca’, ubicada en una exclusiva zona de Ciudad de México por valor de siete millones de dólares, firma a la que también se le adjudicara por licitación la construcción del tren México-Querétaro (hoy revocada). Aristegui fue despedida de MVS noticias, cancelaron su programa de radio y además un juez determinó que se estaba excediendo en su derecho a la libre expresión.
Aristegui Noticias
La periodista ha sentado un precedente en Latinoamérica, al alejarse de las formas tradicionales de informar. Luego de vivir una clara muestra de censura y viéndose reducido su derecho a la libre expresión, Carmen Aristegui decide emprender su propio portal de noticias, apoyada con un equipo de profesionales, retornando así a la radio mexicana: http://www.aristeguinoticias.com.
En un encuentro con periodistas cartageneros y de otras ciudades de Colombia, dice que una de sus preocupaciones es “cómo transitar apropiadamente en entornos digitales”, resaltando que cada vez más la gente se aleja de lo que le parece condicionado, “sacudiéndose esa dominación mediática de siempre” que ahora se quiere instaurar más allá de lo tradicional.
Pero “¿cómo hacemos los periodistas para entender qué quiere la gente en cuanto a información? Y para demás ser muy cuidadosos de interpretar bien”, plantea Aristegui, diciendo que la competencia entre lo tradicional abriéndose espacio en la web y los medios alternativos que ya estaban en ella, exigirá generar mejores contenidos, que respondan a las necesidades del público y vayan acorde a lo que lo digital propone.
Asimismo, se presenta el debate sobre en qué forma los periodistas incidimos en la sociedad estadounidense para que se diera la elección de Donald Trump como presidente, sin embargo, sobre esto personalmente creo que quienes estamos en los medios en el fondo nos sentimos en un pedestal, ignorando asuntos de fondo de la sociedad, viéndose estos reflejados en algo tan trascendental como escoger a un político, pues los noticieros hablan de los negros que mueren en manos de la policía, pero nadie se pregunta por qué esto ocurre de forma sistemática.
“El principal desafío para los periodistas, es no dejar de ser periodistas, y entender la lógica de comunicación diferente pero que no pueda atentar contra lo esencial de la tarea periodística, es decir, que si nos dicen que no se deben hacer entrevistas de 20 minutos porque nadie la va a ver, no hagamos caso, mejor busquemos una gran entrevista que aguante 20 minutos o más…”.
Mujer y periodista

“Creo que a estas alturas de mi vida, he logrado desligar el tema de género de mi trabajo profesional y no me levanto en las mañanas diciendo soy mujer y voy a trabajar”
Es imposible negar la caricaturización que los medios de comunicación han generado respecto a Melania Trump como primera dama de EE.UU y con gran curiosidad le pregunto a Carmen sobre el tema, principalmente qué necesidad existe en mostrarla como un accesorio más de su esposo, perpetuando el estereotipo de la mujer Barbie plástica y sin poder de decisión. Algo es claro, lo que nos han vendido de Melania es eso justamente, pero comparándolo con el fenómeno de Michelle Obama, las dos tienen algo en común y es que solo serán recordadas como las esposas de dos presidentes, sin ponernos a pensar más allá por ejemplo en ¿por qué Michelle no pudo ser la presidenta?.
“Ni los memes, ni la caricaturización sobre Melania serían tan efectivos, si no hubiera de entrada materia de información para reproducirlos. Los medios y las personas deberíamos hacer un esfuerzo para no reproducir estos esquemas mediáticos culturales que afectan seriamente a las mujeres, mostrándolas como secundarias. (…) Quiere decir, que en la sociedad estadounidense también están incluidos esos estereotipos.
Aristegui concluye que no tiene la respuesta sobre cómo manejar de manera adecuada el ‘fenómeno Melania’, pero si cree que es un tema que debe discutirse, sobre todo porque son los medios de comunicación los que ponen la etiqueta de accesorio, para este caso a las primeras damas.
En mi caso, no creo conveniente prejuzgarla por algo que responde a las lógicas del sistema patriarcal y menos, compararla con Michelle Obama, pues son contextos diferentes. Por otro lado, es innegable que reducir a Melania a una cosa es machismo en su máxima expresión y más penoso aún que los medios se presten para reproducir ese lenguaje, Aristegui hablaba de un retroceso, contrario a eso creo que más que retroceder, lo que sucedía era un camuflaje de la realidad en la que nos vemos inmersas las mujeres, ser respetadas por tener educación o ser invisibilizadas por no tenerla.
“Las mujeres a diario tenemos que demostrar que no somos tontas”
[…] Origen: “Hay que seguir haciendo periodismo”: Aristegui […]
Apoyo incondicional a la exelente periodista Carmen Aristegui,siempre de pie ,nunca de rodillas, y sobre el nuevo presidente de EEUU sera el nuevo Hitler?